Empieza la vuelta a casa costeando por el Atlántico hacia el norte.
Dejo Essaouira y subo hacia Safi, pero no por la carretera nacional, sino por una secundaria que bordea el mar. Playas kilométricas y totalmente vírgenes. Gente que me saluda al pasar. Trafico nulo.
Hace un par de días que una diarrea se me está insinuando, pero hoy se presenta ante mi de manera rotunda y esplendorosa. Un par de arbustos de cuneta podrían dar fe de ello.
La primera impresión de Safi es mala, pero una segunda impresión tras un paseo por el centro, es aun peor, así que decido seguir subiendo hasta un pueblo tranquilo y apacible, Oualidia, donde como mirando al mar. Sigo por la carretera de la costa hasta El-Jadida.
Me hospedo en un hotel viejo, decadente, con habitaciones pequeñas, pero con cierto encanto y trato agradable (Hotel Moderne). El desayuno me lo llevan a la cama... entre otras cosas porque no tienen nada parecido a cafetería ni espacio alguno para tal menester.
El-Jadida, al igual que muchos pueblos de la costa, fue fundada por portugueses. Tiene una murallas robustas, una iglesia católica, y una cisterna de aguas, que dicen , es digna de ser vista, pero cuando yo voy no está abierta al publico... una pena. Estos portugueses es lo que tienen... que cuando se proponen hacer algo bien, ...¡¡lo hacen¡¡ jejeje.
Lo que no tiene, o apenas tiene, El-Jadida es turismo. Eso tiene la ventaja de que no te acosan tanto por la calle, pidiendo dinero u ofreciendote cosas. Te miran de reojo con cara de "¿que coño se le habrá perdido al tipo este por aquí?". Tampoco tiene un mercadillo con productos para turistas. Lo que si tiene es mercados callejeros donde se pueden comprar auténticos productos falsos made in China de todo lo que puedas imaginar.
Me cae bien mi diarrea, me trae recuerdos de viajes anteriores, así que decido que me siga acompañando lo que queda de viaje. Creo que me la traeré a España de souvenir. Podría ir a una farmacia y pedir algo, incluso busqué en el traductor como se dice (diarrhée), pero no lo hago. Compartir la vida con ella tiene inconvenientes, pero la convivencia es lo que tiene...momentos malos y momentos buenos ( ...en la salud y en la enfermedad...)
Sigo subiendo por la costa, pero en esta ocasión por una moderna autopista. Circunvalo Casablanca e ignoro Rabat para llegar a Larache.
Paseo por la pequeña y agradable Larache y voy viendo referencias a su pasado español en sus bares, calles, arquitectura....Me tomo algo en el café "La Cara Bonita", que está en los bajos del Hotel Cervantes. Charlo en muy buen castellano con unos señores en la terraza del Restaurante "La Soleá", frente al Hotel España.
Continuo hasta Ashila. Pueblo turístico, también amurallado, también con pasado portugués y español, también con medina con encanto, también con mercadillo para turistas, también con restaurantes con buen pescado.
Hoy me apetece cambiar de menú y me tomo unos espaguetis con marisco que están para chuparse los dedos. Ademas, por primera vez en el viaje, no solo me sirven cerveza, si no que consientan que la beba en publico mientras ceno en la terraza en la calle al borde mar.
Duermo en hotel cutre de mochileros, encima de una mezquita o algo parecido y tengo que aguantar la murga de los rezos a horas intempestivas y el chunda chunda del casete de otro vecino.
Por la mañana un tipo con el que charlé de intrascendencias por la noche, pretende cobrarme por (supuestamente) haberme vigilado la moto toda la noche, cosa que yo no le he pedido, ni ha hecho y no pienso pagarle. La bronca es gorda, el tipo se pone violento y amaga con no dejarme salir con la moto. Yo a su vez amago con llevármelo por delante con la moto (¡¡ y lo haría¡¡). Finalmente se aparta y me deja paso libre mientras suelta una serie de improperios que no entiendo, pero imagino. Con el equivalente a 1 € lo hubiese arreglado, pero ¡no-me-da-la-ga-na¡.
¿Será que la cercanía a España me vuelve mas intolerante?.. Puede ser.
Vuelvo a la fea y caótica Tanger, busco billete, embarco en el ferry y....vuelta a Tarifa.
Ya en España hablé muy seriamente con ella. Le dije : "sabes que te aprecio, pero como amiga.Tu te mereces a alguien mejor. Nuestros caminos se separan aquí. Lo nuestro no iba a funcionar. Es mejor así, ya veras. Encontraras a otro que te merezca. Fue bonito mientras duró.....".
Voy a una farmacia y compro "Fortasec 2mg" , para el tratamiento sintomático de la diarrea aguda e inespecifica en adultos y niños a partir de los 12 años. (¡¡Capsulas duras¡¡).
Faltan 1000 kmts , mis gatos, mi edredón y mi ducha me esperan y no quiero contratiempos durante el viaje.
Dejo Essaouira y subo hacia Safi, pero no por la carretera nacional, sino por una secundaria que bordea el mar. Playas kilométricas y totalmente vírgenes. Gente que me saluda al pasar. Trafico nulo.
Hace un par de días que una diarrea se me está insinuando, pero hoy se presenta ante mi de manera rotunda y esplendorosa. Un par de arbustos de cuneta podrían dar fe de ello.
La primera impresión de Safi es mala, pero una segunda impresión tras un paseo por el centro, es aun peor, así que decido seguir subiendo hasta un pueblo tranquilo y apacible, Oualidia, donde como mirando al mar. Sigo por la carretera de la costa hasta El-Jadida.
Me hospedo en un hotel viejo, decadente, con habitaciones pequeñas, pero con cierto encanto y trato agradable (Hotel Moderne). El desayuno me lo llevan a la cama... entre otras cosas porque no tienen nada parecido a cafetería ni espacio alguno para tal menester.
El-Jadida, al igual que muchos pueblos de la costa, fue fundada por portugueses. Tiene una murallas robustas, una iglesia católica, y una cisterna de aguas, que dicen , es digna de ser vista, pero cuando yo voy no está abierta al publico... una pena. Estos portugueses es lo que tienen... que cuando se proponen hacer algo bien, ...¡¡lo hacen¡¡ jejeje.
Lo que no tiene, o apenas tiene, El-Jadida es turismo. Eso tiene la ventaja de que no te acosan tanto por la calle, pidiendo dinero u ofreciendote cosas. Te miran de reojo con cara de "¿que coño se le habrá perdido al tipo este por aquí?". Tampoco tiene un mercadillo con productos para turistas. Lo que si tiene es mercados callejeros donde se pueden comprar auténticos productos falsos made in China de todo lo que puedas imaginar.
Me cae bien mi diarrea, me trae recuerdos de viajes anteriores, así que decido que me siga acompañando lo que queda de viaje. Creo que me la traeré a España de souvenir. Podría ir a una farmacia y pedir algo, incluso busqué en el traductor como se dice (diarrhée), pero no lo hago. Compartir la vida con ella tiene inconvenientes, pero la convivencia es lo que tiene...momentos malos y momentos buenos ( ...en la salud y en la enfermedad...)
Sigo subiendo por la costa, pero en esta ocasión por una moderna autopista. Circunvalo Casablanca e ignoro Rabat para llegar a Larache.
Paseo por la pequeña y agradable Larache y voy viendo referencias a su pasado español en sus bares, calles, arquitectura....Me tomo algo en el café "La Cara Bonita", que está en los bajos del Hotel Cervantes. Charlo en muy buen castellano con unos señores en la terraza del Restaurante "La Soleá", frente al Hotel España.
Continuo hasta Ashila. Pueblo turístico, también amurallado, también con pasado portugués y español, también con medina con encanto, también con mercadillo para turistas, también con restaurantes con buen pescado.
Hoy me apetece cambiar de menú y me tomo unos espaguetis con marisco que están para chuparse los dedos. Ademas, por primera vez en el viaje, no solo me sirven cerveza, si no que consientan que la beba en publico mientras ceno en la terraza en la calle al borde mar.
Duermo en hotel cutre de mochileros, encima de una mezquita o algo parecido y tengo que aguantar la murga de los rezos a horas intempestivas y el chunda chunda del casete de otro vecino.
Por la mañana un tipo con el que charlé de intrascendencias por la noche, pretende cobrarme por (supuestamente) haberme vigilado la moto toda la noche, cosa que yo no le he pedido, ni ha hecho y no pienso pagarle. La bronca es gorda, el tipo se pone violento y amaga con no dejarme salir con la moto. Yo a su vez amago con llevármelo por delante con la moto (¡¡ y lo haría¡¡). Finalmente se aparta y me deja paso libre mientras suelta una serie de improperios que no entiendo, pero imagino. Con el equivalente a 1 € lo hubiese arreglado, pero ¡no-me-da-la-ga-na¡.
¿Será que la cercanía a España me vuelve mas intolerante?.. Puede ser.
Vuelvo a la fea y caótica Tanger, busco billete, embarco en el ferry y....vuelta a Tarifa.
Ya en España hablé muy seriamente con ella. Le dije : "sabes que te aprecio, pero como amiga.Tu te mereces a alguien mejor. Nuestros caminos se separan aquí. Lo nuestro no iba a funcionar. Es mejor así, ya veras. Encontraras a otro que te merezca. Fue bonito mientras duró.....".
Voy a una farmacia y compro "Fortasec 2mg" , para el tratamiento sintomático de la diarrea aguda e inespecifica en adultos y niños a partir de los 12 años. (¡¡Capsulas duras¡¡).
Faltan 1000 kmts , mis gatos, mi edredón y mi ducha me esperan y no quiero contratiempos durante el viaje.